El nuevo hombre lobo: si hay pocas expectativas es correcta

Si la veis sin expectativas altas, cumplirá de manera ajustada
The post El nuevo hombre lobo: si hay pocas expectativas es correcta first appeared on Hércules.  No podía faltar, con los tiempos que corren de secuelas, precuelas y nuevas versiones cinematográficas de personajes o universos que hemos visto antes, e incluso remakes, una nueva versión del mítico hombre lobo, una leyenda que se remonta décadas y décadas atrás, con múltiples adaptaciones, cuentos, novelas, cómics y un sinfín de historias que nos han regalado sobre este personaje. A nivel cinematográfico, todo empezó en 1941 con la película del cineasta George Waggner. El actor que dio vida a este temible personaje fue Lon Chaney Jr., un actor muy conocido de la época, con decenas de obras que terminaron consolidando su carrera con una filmografía notable.

La película, teniendo en cuenta el año en que se estrenó, causó muchísimo impacto en el público. Era la primera vez que se veía algo así en la pantalla grande. Tuvo una recepción positiva y, con el paso de los años, la aceptación del público fue en aumento. Tanto es así que, en 1943, debido a su éxito, se produjo un crossover entre Frankenstein y el hombre lobo en una película conjunta, algo insólito para la época. Parece una anécdota o un evento que hoy en día se celebraría, pero estoy hablando de un acontecimiento de hace más de 70 años. Increíble.

En 1980 se estrenó también una película titulada El retorno del hombre lobo, que, curiosamente, era española. Fue dirigida por Paul Naschy. La película, de un éxito mucho menor, fue medianamente bien recibida, pero con el paso de los años se valoró más. Saltamos ahora al año 2010, cuando se lanzó probablemente la obra más conocida, aunque lamentablemente fue recibida negativamente por la crítica: El hombre lobo, del director Joe Johnston. Contó con un reparto estelar: Benicio Del Toro, Hugo Weaving, Anthony Hopkins y Emily Blunt. Aunque a la audiencia le gustó más que a la crítica, tampoco generó gran entusiasmo. A día de hoy, es la que más suele conocer la gente. Todo sea dicho, a mí la película me parece francamente buena y no entiendo las malas críticas. Sin ser una maravilla, creo que fue un producto más que decente.

También quiero destacar que la mítica figura del hombre lobo, sin ser siempre la protagonista, ha aparecido en películas como Van Helsing, donde quizá se enfoca más como un monstruo espectacular que como un hombre mitad humano, mitad lobo. También está la mítica película Underworld, muy disfrutable, por cierto, donde los hombres lobo (en plural) eran los antagonistas. Y así, un largo etcétera de apariciones cinematográficas e incluso televisivas, como el especial de Marvel Studios en Disney Plus, La maldición del hombre lobo. Pero quería recalcar las que he mencionado para que podamos ver el desarrollo e impacto cinematográfico de esta figura a lo largo de los años.

Hace poco se anunció un nuevo proyecto, de la mano de la productora Blumhouse, que sinceramente tuvo un 2024 bastante malo, con muchos productos que dejaron mucho que desear. Algunos ejemplos: Imaginary, La piscina, y su remake No hables con extraños. Ahora, en 2025, se ha estrenado su película Wolfman, que es una nueva versión. Ha traído algo de polémica porque el diseño del hombre lobo no ha gustado mucho. No es quizás lo que se esperaba, pero aun así…

¿Un hombre lobo a la altura de su leyenda?

Pues… la palabra que define esta película sería «irregular». La frase “ha estado bien” sería correcta, pero podría haber sido mucho más. Deja una sensación bastante agria, ya que tiene aspectos realmente buenos y de buen nivel, pero otros que decepcionan desde el segundo uno.

Empecemos con lo bueno: el uso de la tensión. El manejo de la dirección de Leigh Whannell es francamente genial. Durante los primeros 45 minutos de la película, hay muchas escenas de tensión manejadas de forma fabulosa. Esto no es sorpresa, ya que en su última película, El hombre invisible, hizo un trabajo estupendo en este aspecto. Los efectos de sonido también son destacables. Toda la edición de sonido, los sonidos envolventes y cómo la figura del hombre lobo tiene que escuchar ciertas cosas en determinados momentos son excepcionales. Retumban en la sala de cine con un trabajo sobresaliente. Repito: los primeros 45 minutos, aunque con tensión muy bien manejada, son prácticamente lo mejor de la película. El maquillaje y los efectos prácticos están cuidados, con un trabajo técnico notable. Los efectos de heridas, sangre y las partes más desagradables de la transformación del lobo están muy bien logrados. Sin embargo, hay una parte hecha con CGI (la visión del hombre lobo) que es bastante mala.

Ahora lo malo: lamentablemente, el error más grave de la película es el diseño del hombre lobo. Una figura popular tan icónica y conocida no puede permitirse un diseño que, desde el segundo uno, le reste impacto a las escenas y eficacia en el terror. Parece más un orco o una figura monstruosa con un virus que el propio hombre lobo. Otro fallo es el momento que debería ser mítico: la transformación. Es demasiado rápida y carece de un tema musical potente que la acompañe. Por último, lo que más pesa es el guion. Aunque empieza muy bien, se desinfla en los últimos 35 minutos, volviéndose una película genérica y olvidable con una sensación negativa.

En cuanto a las actuaciones, poco que reprochar, aunque sí un detalle. Christopher Abbott da vida al hombre lobo y realmente lo hace genial. La interpretación de los gestos, el malestar, las convulsiones y el mal rollo es impecable. Sin embargo, es una pena que su diseño empañe su actuación. Julia Garner, en general, está bien, sin destacar mucho, aunque tiene algunos momentos demasiado fríos e insípidos en los que le cuesta transmitir el terror que ven sus ojos. Por último, Matilda Firth tiene una actuación sólida.

La sinopsis es sencilla: una familia compuesta por padre, madre e hija, que no pasa su mejor momento tras una tragedia familiar, decide visitar una antigua casa de un miembro de la familia para recoger unas pertenencias. Allí, algo más oscuro les espera. Os he contado poco; tendréis que descubrir el resto.

Wolfman es una película descafeinada que pudo dar más de sí. Me quedo con lo bueno que tiene, aunque lo malo pesa mucho. Es una obra cinematográfica correcta, llena de altibajos, pero que pasará sin pena ni gloria. Con los medios actuales, podría haberse hecho algo de mucha más calidad y valor generacional. Lamentablemente, no es el caso. Si la veis sin expectativas altas, cumplirá de manera ajustada.

The post El nuevo hombre lobo: si hay pocas expectativas es correcta first appeared on Hércules.