El director del FBI asoció la sordidez de los bajos fondos con los entresijos del deporte profesional en una espectacular rueda de prensa. Algunas personas que estuvieron implicadas en la mafia y las apuestas ven un patrón de fechorías inevitables (y de delirios febriles un tanto exagerados) en esta trama.
El director del FBI asoció la sordidez de los bajos fondos con los entresijos del deporte profesional en una espectacular rueda de prensa. Algunas personas que estuvieron implicadas en la mafia y las apuestas ven un patrón de fechorías inevitables (y de delirios febriles un tanto exagerados) en esta trama.


