La princesa, excampeona olímpica de 46 años, es consciente de los cambios que ha experimentado su cuerpo: «Cuando era joven entrenaba muy duro, me exigía mucho físicamente. Hoy en día, todo es cuestión de moderación».
La princesa, excampeona olímpica de 46 años, es consciente de los cambios que ha experimentado su cuerpo: «Cuando era joven entrenaba muy duro, me exigía mucho físicamente. Hoy en día, todo es cuestión de moderación».