Amal y George Clooney luchan siempre por mantener a sus hijos alejados de las miradas y han encontrado una fórmula para convertir su casa en un lugar en el que la privacidad prima.
Amal y George Clooney luchan siempre por mantener a sus hijos alejados de las miradas y han encontrado una fórmula para convertir su casa en un lugar en el que la privacidad prima.