Presentado en una ceremonia que convocó a lo más cool de la sociedad de Miami, el primer GT de la factoria británica usa el arte para aunar clasicismo y modernidad en un coche tan osado como el lema de su fundador: copy nothing.
Presentado en una ceremonia que convocó a lo más cool de la sociedad de Miami, el primer GT de la factoria británica usa el arte para aunar clasicismo y modernidad en un coche tan osado como el lema de su fundador: copy nothing.