Heidi Godman, editora de la revista de salud de Harvard: “el hambre emocional no se calma con comida, solo te distrae por un momento”

Heidi Godman, editora de la revista de salud de Harvard: “el hambre emocional no se calma con comida, solo te distrae por un momento”

Llegas a casa después de un día difícil. No tienes hambre, pero vas directo a la cocina. Abres la alacena, escoges algo dulce o salado, y comes sin pensarlo mucho. Tal vez no es la primera vez que lo haces, y puede que no sea la última. De hecho, no te has dado cuenta, pero
The post Heidi Godman, editora de la revista de salud de Harvard: “el hambre emocional no se calma con comida, solo te distrae por un momento” appeared first on Mejor con Salud.  Llegas a casa después de un día difícil. No tienes hambre, pero vas directo a la cocina. Abres la alacena, escoges algo dulce o salado, y comes sin pensarlo mucho. Tal vez no es la primera vez que lo haces, y puede que no sea la última. De hecho, no te has dado cuenta, pero siempre que sientes estrés, ansiedad o emociones incómodas buscas refugio en la comida. 

Para Heidi Godman, editora de la Harvard Health Letter, la comida reconfortante es la forma en que muchas personas afrontan las situaciones difíciles. Sin embargo, explica: “El hambre emocional no se calma con comida, solo te distrae por un momento”. Y es que no soluciona el problema real y, por el contrario, trae consigo sentimientos de culpa.

Reconocer tus patrones de pensamiento es el punto de partida

Muchas veces crees que tienes hambre, pero en realidad estás buscando consuelo en la comida porque tienes mucho estrés y ansiedad. Hacerte consciente de por qué lo estás haciendo es el primer paso para empezar a corregirlo. Basándose en su labor como periodista médica, Godman recomienda tomar un respiro y esperar unos segundos antes de dejarte llevar por el impulso.

¿Qué deberías hacer? Intentar reconocer para qué quieres comer. Considera si la comida es tu escape para calmarte, elevar tu estado de ánimo o la forma de compensar un día difícil. Cuando tienes claridad de que estás comiendo por ansiedad, empiezas a resistirte más a los antojos y te abres a buscar otras alternativas para cambiar ese patrón de conducta.

        <div class="read-too">
            <strong>No dejes de leer</strong>:
                <a href="https://mejorconsalud.as.com/que-hacer-despues-comer-exceso/" target="_self" title="¿Qué hacer después de comer en exceso?">¿Qué hacer después de comer en exceso?</a>

        </div>

Llevar un diario de comidas te puede ayudar

“Una vez que reconozcas un patrón, desarrolla una estrategia para romperlo”, dice la editora de Harvard. Una de las formas de hacerlo es registrar lo que comes, en qué momento tienes esa necesidad y, sobre todo, cómo te sentiste al hacerlo. Los diarios de comida son herramientas muy útiles porque te obligan a detenerte y observar lo que hay detrás de las ganas de comer.

Al anotar tus emociones y pensamientos, y los tipos de comidas que eliges para gestionarlos, es más fácil comprender si estás comiendo porque tienes hambre física o por una necesidad emocional. No siempre se trata de tristeza, soledad o estrés; puede que también tengas atracones cuando estés muy emocionado o feliz. Saberlo te dará la consciencia necesaria para elegir otras formas de gestión.

El yoga, la meditación y la práctica de ejercicio físico son formas saludables de afrontar eso que sientes porque te liberan de tensión, te ayudan a conectar con tu cuerpo y rompen ese deseo urgente de comer para estar bien.

Permítete distraerte sin culpas

Algo que no debes ignorar es que el hambre emocional puede tener un estrecho vínculo con el ritmo de vida actual. Quizá lo has normalizado, pero pasas de un trabajo a otro, te obligas a ser eficiente a lo largo del día y no dejas espacio para descansar sin sentir culpa. En medio de todo eso, comer se vuelve ese placer con el que sientes que desconectas, aunque no sea así.

Si reconoces que puede ser tu caso, empieza a aprovechar mejor tus pausas activas. Como sugiere Godman, “las mejores distracciones de la alimentación emocional son aquellas que toman solo cinco minutos”. Suelta el control en ese espacio y busca entretenerte con actividades que te generen calma:

  • Salir a caminar
  • Sentarte en silencio al aire libre
  • Poner tu música favorita y bailar
  • Llamar a un amigo cercano y conversar
  • Hacer ejercicios de respiración y estiramiento
        <div class="read-too">
            <strong>Visita</strong>:
                <a href="https://mejorconsalud.as.com/tipos-descanso-toda-persona-necesita/" target="_self" title="Los 7 tipos de descanso que toda persona necesita">Los 7 tipos de descanso que toda persona necesita</a>

        </div>

No subestimes la ayuda profesional

En el hambre emocional hay muchos factores involucrados, y muchos de ellos son tan complejos que requieren ayuda profesional. A veces, por más de que tienes voluntad para corregirlo, recaes una y otra vez. ¿Te pasa? Considera acudir a un psicólogo o terapeuta. Enfoques como la terapia cognitivo conductual (TCC) te pueden ayudar a responder de forma más consciente a este problema.

Recuerda que no se trata solo de “dejar de comer por ansiedad”. Es aprender a escuchar lo que sientes, comprender por qué te afecta de este modo y entender que si no lo controlas a tiempo, tu cuerpo y tu salud pueden acabar perjudicados.

Imagen principal: collage con fotografía de la editora y periodista Heidi Godman en U.S. News & World Report. 

The post Heidi Godman, editora de la revista de salud de Harvard: “el hambre emocional no se calma con comida, solo te distrae por un momento” appeared first on Mejor con Salud.