RTVE, EFE y El País acumulan pérdidas, rechazo de sus plantillas y caídas de audiencia por su deriva partidista y el control del Gobierno de Sánchez
The post Prisa, RTVE y EFE: la crisis constante de los medios afines al PSOE first appeared on Hércules. Los principales medios de comunicación públicos y afines al PSOE atraviesan una profunda crisis de credibilidad, audiencia y viabilidad económica. RTVE, la Agencia EFE y el diario El País, del Grupo Prisa, viven un periodo de declive sin precedentes, marcado por el desgaste de su reputación y la pérdida de influencia en la opinión pública. Las denuncias por manipulación informativa, opacidad y favoritismo político han alimentado un malestar creciente en sus propias plantillas y entre los espectadores y lectores. A mitad de la tercera legislatura de Pedro Sánchez, el modelo de medios controlados y alineados con el Ejecutivo parece estar agotado.
El declive de RTVE: déficit millonario y contenidos sin rumbo
La Radiotelevisión Española (RTVE) atraviesa uno de sus peores momentos. Bajo la presidencia de José Pablo López, la corporación pública ha cerrado 2024 con un déficit de 30 millones de euros, que se suma a una gestión marcada por el despilfarro y el desgaste de su credibilidad. A pesar de recibir una aportación extra de 100 millones del Gobierno para cubrir los costes de la Eurocopa y los Juegos Olímpicos, RTVE ha vuelto a las cuentas en rojo y ha tenido que recurrir por primera vez desde 2019 al fondo de reserva de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI).
El agujero económico coincide con la polémica estrategia de contenidos que ha provocado un rechazo casi unánime dentro y fuera de la Corporación. El modelo de entretenimiento impulsado por López, que incluye programas como La familia de la tele o La revuelta de David Broncano, ha sido tachado de “vulgarización” por los propios profesionales. El Consejo de Informativos, sindicatos y exdirectivos denuncian que la programación se ha convertido en un vehículo de propaganda partidista, con un “mensaje político claro y medido” incluso en los espacios de entretenimiento.
La Agencia EFE, opacidad y descontento
Paralelamente, la Agencia EFE sigue la estela del caos en RTVE. La elección de Miguel Ángel Oliver, exsecretario de Comunicación con Pedro Sánchez, como presidente ha desatado un clima de tensión creciente. La sección sindical de CCOO alerta de un “rumbo autoritario” en la gestión y denuncia un modelo de agencia de colocación plagado de favoritismos, sueldos opacos y procesos de contratación “de dudosa transparencia”.
Oliver, que incluso integró las listas del PSOE en Madrid en 2019, ha sido acusado de exigir “lealtades incondicionales” y aplicar recortes salariales a los redactores de nuevo ingreso mientras mantiene una retribución anual de 136.000 euros y privilegios para sus afines. El sindicato advierte que el Plan Estratégico de la agencia no ha sido compartido con los trabajadores y se teme una copia del modelo RTVE: más espectáculo, menos periodismo.
El País en caída libre
La tercera pata del trípode mediático próximo al PSOE, El País, también muestra señales claras de desgaste. El buque insignia del Grupo Prisa cerró 2024 como el sexto digital más leído del país, muy lejos de sus días de liderazgo. Superado por medios como El Español, La Vanguardia y 20 Minutos, el diario dirigido por Pepa Bueno no logra recuperar audiencia ni prestigio. En marzo de 2025, volvió a perder usuarios únicos por segundo mes consecutivo, quedando fuera del podio digital.
El deterioro de su imagen tiene una explicación recurrente en los análisis del sector: su marcado sesgo a favor del PSOE. Desde que Pedro Sánchez llegó a La Moncloa, El País ha reforzado su alineamiento con el Gobierno, lo que ha provocado una fuga de lectores en busca de medios más imparciales. Aunque conserva una base sólida de suscriptores digitales, su crecimiento se ha estancado frente al auge de cabeceras rivales.
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