El presidente ruso ha aceptado una tregua de 30 días en lo que corresponde a materias e infraestructuras energéticas
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Imagen: el presidente de EE.UU., Donald Trump y Zelenski I Reuters
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mantuvo este miércoles una conversación telefónica con su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski, un día después de haber hablado con el mandatario ruso, Vladímir Putin, sobre la posibilidad de un alto el fuego en Ucrania.
Durante la llamada, que se prolongó por una hora, Trump calificó el intercambio como “muy bueno” y aseguró que gran parte del diálogo estuvo centrado en su reciente conversación con Putin, tal como ha informado el ABC. Según el líder estadounidense, el objetivo era coordinar las posturas de Rusia y Ucrania en torno a sus respectivas exigencias y necesidades. Además, afirmó que el proceso “va por buen camino” y anunció que el secretario de Estado, Marco Rubio, junto con el asesor de seguridad nacional, Michael Waltz, ofrecerán una descripción detallada de los temas tratados en un comunicado que se publicará próximamente.
Primer contacto tras la expulsión de Zelenski de la Casa Blanca
Se trata del primer contacto directo entre ambos mandatarios desde que Trump expulsó a Zelenski de la Casa Blanca el pasado 28 de febrero, luego de que el líder ucraniano rechazara aceptar un alto el fuego que, hasta el momento, tampoco cuenta con la aprobación de Putin.
En su conversación con Trump del martes, Putin supuestamente se comprometió a no atacar infraestructuras civiles ni energéticas durante un período de 30 días. Sin embargo, el ucraniano cuestionó este compromiso y lo calificó de alejado de la realidad, luego de que Rusia lanzara 150 drones contra distintas regiones de Ucrania en las últimas horas.
Ataques tras la promesa de Putin
Pese a las declaraciones del Kremlin, Ucrania denunció que poco después de la llamada entre Trump y Putin, dos hospitales, una vía ferroviaria y más de 20 viviendas fueron bombardeadas. Estos ataques han alimentado el escepticismo en Kiev sobre la voluntad real de Moscú para alcanzar una tregua.
Zelenski expresó su inquietud por las condiciones que Rusia sigue imponiendo para un eventual acuerdo de paz y advirtió que su gobierno no aceptará ninguna propuesta que implique ceder territorios. Desde la Casa Blanca, sin embargo, se insistió en que la conversación entre Trump y Putin fue “el primer paso hacia la paz” y que Washington busca un cese de hostilidades en el mar Negro como parte de una solución más amplia al conflicto.
Persisten las exigencias de Moscú
A pesar de los contactos diplomáticos, Putin no ha mostrado intención de ceder en sus principales exigencias: la anexión de los territorios ocupados, el fin del apoyo militar de Occidente a Ucrania y la renuncia de Kiev a integrarse en la OTAN.
Por otro lado, Moscú acusó a Ucrania de haber atacado una planta energética en la región de Krasnodar, cerca de Crimea, causando incendios y daños en una infraestructura clave para la exportación de petróleo. Según el Kremlin, esta acción demuestra que Kiev intenta “boicotear los esfuerzos de Trump por poner fin al conflicto”.
Ahora, el presidente estadounidense enfrenta presiones tanto de Rusia como de Ucrania para definir su postura sobre el futuro de la guerra, en un contexto en el que sus aliados europeos advierten que cualquier alto el fuego debe evitar concesiones favorables a Moscú.
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