Después de tantas mudanzas y de fundir los ajuares literarios de los dos nos dimos cuenta de una cruel realidad: había que deshacerse de un buen puñado de libros. Pero, ¿cómo se hace eso?
Después de tantas mudanzas y de fundir los ajuares literarios de los dos nos dimos cuenta de una cruel realidad: había que deshacerse de un buen puñado de libros. Pero, ¿cómo se hace eso?